Yo querría ser

¿Quién no ha jugado a disfrazarse abriendo el armario de sus padres? Este año en el Flic os proponemos que os disfracéis de los protagonistas de algunos de los grandes clásicos de la literatura infantil y juvenil ¡Qué divertido es aprender imitando el personaje de la página tres de este cuento que tanto me gusta, poniéndome un sombrero extravagante, una camiseta exageradamente colorida o pintándome toda la cara de amarillo!

Cuando los más pequeños se disfrazan ponen en marcha la fantasía, la creatividad y la inventiva para imitar personajes ficticios, históricos, profesiones o personas a quienes conocen, convirtiéndose, por unos momentos, en otro ser, al tiempo que en su cabecita van creando la historia que lo hace posible.